El Jefazo - Review


Les seré honesto, el siguiente disco es de una banda que no conocía hace 2 semanas, la banda peruana de Stoner Rock, El Jefazo, es una de las que más me gustó al momento de escucharlas. Además va a ser el primer álbum instrumental que vemos en este humilde blog, así que no esperen que hable de letras.

Yendo con el disco, este tiene un estilo curioso, hablamos del stoner rock, el cual fusiona de una manera increíble dos géneros memorables en este tipo de música, la psicodelia setentera más la grandiosa furia de la distorsión, ofrecida por el hard rock. En otras palabras, este es un género que al escucharlo, sentiremos como si estuviéramos en un paraíso pacífico, o incluso nos puede teletransportar al mismo averno.

Ya, sin mucho floro, vamos a las canciones:

1. Portal:

Empezamos con una guitarra fuertemente distorsionada, la cual va acompañada de una batería estremecedora. Mientras los instrumentos avanzan sentimos como si fueran las seis cuerdas las cantantes. En una parte, escuchamos como la velocidad intenta apoderarse de la pista, sin embargo después de esto pausamos, oyendo un momento tranquilo. Pero, esto no dura mucho, ya que vuelve el caos. En el paraíso caótico se avisa la presencia de un solo de guitarra, el cual se nota como si fueran dos, debido a la forma en la que se construye la canción. Esta pista acaba con ese magnífico punteo, al cual se le suman determinados efectos para incrementar esa sensación de desorden.

2. Estampida:

Ahora, nos vamos a una batería demoledora, la cual va acompañada de seis cuerdas llenas de poder y efectos. Después, escuchamos como sale otra guitarra, pero solista, con la cual se realiza un solo grandioso. Seguido este punteo, oímos como se vuelve a la base anterior. Sin embargo, las estremecedoras 6 cuerdas son más fuertes, poseyendo la capacidad de cambiar el ritmo de la pista, poniéndolo más lento. Durante esta supuesta calma, escuchamos un efecto que continua en la canción, el cual solo nos pone en una parte llena de asombro, que no necesita realizar más para dejar satisfecho a su público. Sin embargo, la pista es engañosa, y a pesar de haber "acabado", el bajista es más astuto, y realiza un punteo que se complementa de una manera increíble con los efectos. Después de ese épico momento, la banda decide realizar un exquisito solo, que deja atónitos a los que lo escuchan, como si el cielo y el infierno estuvieran en una batalla de la que ninguno pueda salir vencedor, y es así como llegamos al final de la pista.

3. Río Tinto:

La banda juega con los efectos para poder traer una canción llena de poder y guitarrazos maestros. Dando rienda suelta a que tanto el bajo como la guitarra puedan sacar sus instintos más violentos. Después de mucha violencia, escuchamos como sale un solo de esas magníficas 6 cuerdas, las cuales avisan de una posible llegada de una figura inhóspita a la canción, sacando sus más ínfimos golpes. Cuando la canción esta por acabar, sentimos como se juega con los efectos en la guitarra, dando estocadas maestras con esas seis cuerdas. La pista termina con un juego en los efectos, que dejan un sentimiento de incertidumbre a esta.

4. Megalodonte:

Ahora, empezamos con una instrumental perfecta para poguear, dando luz a que se pueda realizar un descontrol, esto debido a lo que realiza el bajo en la canción. No hay nada que se pueda salvar de la destrucción que provoca esta pista. Conforme va avanzando la obra, escuchamos como un solo de guitarra, lleno de actitud se apodera del escenario, y deja a todos sin oportunidad para salvarse. Cuando el bajo vuelve a ser el centro de atención, pone en tensión al oyente, gracias a la forma en que las notas suben, quitando la posibilidad de huir ante tan impresionante tocada. El final de la canción esta lleno de poderío, a pasos lentos muestra la verdadera potencia de la banda.

5. Gadawan Cura:

La banda vuelve a hacer uso de la potencia de la guitarra para hacer de esta pista algo inolvidable. Sin embargo, también escuchamos una base increíble brindada por el bajo, en la cual se unen dos solos de las increíbles cuerdas que se hayan en la canción. Cuando estos punteos acaban, escuchamos un aumento bestial de velocidad, dando luz a que la bulla crezca, y con eso las ganas inconmensurables de poguear, básicamente este momento es de sálvese quien pueda, sino corres el riesgo de morir por tal cantidad de golpes. Acabando la canción, esta pasa a ser más lenta y recatada, sin dejar de lado la garra que mete la agrupación.

6. El Cañón De La Eternidad:

Vamos con la última canción del disco, la cual es iniciada por un bajo ahogado y una guitarra escondida. Posteriormente, se suma la batería, la cual suena más que los instrumentos nombrados anteriormente. Sin embargo, solo era cuestión de tiempo para que el caos gobierne. Esta última pista, pareciera tener una presencia fantasmal en medio, esto gracias a la capacidad que agarra la guitarra para las ecualizaciones, efectos y magníficos punteos. Después de mucha lentitud, la bulla vuelve a salir, dando a conocer la incontenible furia de la banda, incluyendo dos guitarras que hacen un ritmo y una tercera, que se encarga de llevar a cabo un solo, digno de los dioses. Para cuando el punteo anterior termina, vemos que solo ha pasado la mitad de la pista, aumentando la cantidad, y la calidad, de los solos que son audibles en la canción. Para terminar, se da unos golpes tremendos en la batería, acompañados de mil y un efectos, que nos imprimen esa sensación de caos terminando la obra.

Para Terminar...

Siendo una banda que jamas había escuchado en la vida, me impresiona la calidad con la cual se han mostrado frente a sus oyentes. Mostrando un punto increíble de lo que es el sufrimiento en las obras instrumentales.

Como siempre, si vas a comer un helado, procura que no sea con las más violentas, porque de un headbang se te va a caer, mejor hazlo en las lentas, ya que hasta te hacen reflexionar jajaja.



Comentarios

  1. Yo no sabia leer, tuve que aprender para poder leer este pedazo de artículo. Buenardo 👍.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares